HOSTELVENDING.COM 27/01/2021.- Frente a la falta de poseer un lugar diferenciado donde desarrollar la actividad laboral de forma cómoda, segura y motivacional, es necesario plantear soluciones a un nicho de mercado notorio. Por su parte, los hoteles están tomando el relevo, conviertiéndose en atractivos espacios de trabajo que aportan ese valor añadido para el trabajador, y donde la distribución automática jugará un papel destacado.

Las rutinas laborales han cambiado, y por ende, los ambientes de trabajo. Si antes de la pandemia las oficinas obsoletas y tradicionales se abrían camino hacia nuevos espacios de trabajo donde las zonas de relax eran cruciales, tras el estallido de la Covid-19, el concepto de “entorno laboral” ha mutado radicalmente.

Durante la crisis sanitaria, los negocios han tenido que reinventar su propia naturaleza, buscar otras vías para acercarse al usuario y a su demanda actual: al igual que ha ocurrido con los bares de copas y discotecas y su transformación en restaurante, ahora, los hoteles, son las nuevas oficinas.

Más que oficinas, son espacios alternativos al estilo coworking. Una gran parte de estos establecimientos, sobre todo los ubicados en áreas urbanas, se han ofrecido a empresas y trabajadores como un espacio de teletrabajo, tanto en sus zonas comunes como en las propias habitaciones.

Una manera de sobrevivir que tienen estos sectores en los que la covid-19 ha golpeado con fuerza.

Con algunas cadenas hoteleras embarcándose ya en esta nueva realidad, está surgiendo un nuevo concepto para hacer referencia a la tendencia “Coworking de lujo”, porque auna la idea de zonas compartidas en las que pequeñas y grandes empresas, startups, freelancers o autónomos comparten localización, y el servicio y el ambiente más luxury de un hotel.

Ejemplos encontramos en Barcelona, de la mano de InterContinental, un hotel de cinco estrellas que acaba de lanzar un plan de coworking pensado para ofrecer un entorno de trabajo cálido y temporal a aquellas personas que quieran trabajar en un entorno de lujo y confortable para dar un giro a su jornada laboral.

El plan, que está disponible tanto por días como por semanas o meses, incluye la reserva del espacio, con una mesa de trabajo ubicada en un entorno exclusivo, café e infusiones  Wifi de la mano de máquinas superautomáticas, impresora y scanner, además de agua ilimitada y un 15% de descuento en servicios de restauración y Spa.

Adaptar el espacio de trabajo a las necesidades cambiantes

Por otra parte, otra de las tendencias emergentes son las oficinas flexibles. Cuando hablamos de espacios flexibles nos referimos a zonas que se habilitan según las necesidades del usuario. Este tipo de necesidades son cambiantes dependiendo del sector y la compañía, pero hay tres peticiones muy comunes entre los clientes internacionales. La primera es la flexibilidad del espacio en relación al crecimiento de la plantilla, así como en cuanto a la duración del contrato.

La segunda se basa en la facilidad de encontrar oficinas con toda la implementación ya realizada y el consiguiente ahorro en Capex, o la ventaja de no realizar las gestiones de contratación de suministros ni que estos supongan un coste adicional (se incluyen en la mensualidad). 

Y, por último, contar con oficinas que prioricen el bienestar del empleado, creando un entorno seguro y cómodo para todos.

A pesar de la situación económica que ha generado la crisis sanitaria, España es un mercado que mantiene su atractivo para las empresas internacionales en cuanto a destino laboral. De hecho, existen muchas compañías conquistadas por las diferentes posibilidades que ofrece el país, y siguen valorando instalar una sede en España. Así lo apunta un estudio realizado por ICEX, que refleja cómo en los últimos 4 años más del 60% de la financiación de startups procede de inversores extranjeros. 

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