Distribución automática, la eterna olvidada del Gobierno

HOSTELVENDING.COM 04/11/2020.- El sector no ha sido incluido en el nuevo Decreto “DL Ristori”, elaborado por el Gobierno Italiano. Frente a ello, la CONFIDA demanda que se tomen medidas a favor de la distribución automática también.
La industria del vending vuelve a quedar en el ostracismo por parte del Estado. En el caso italiano, tras enfrentarse a las DPCM del Gobierno, del 18 y 24 de octubre, prevén un 50% de “smart working” o teletrabajo para la Administración Pública, y que recomiendan la adopción de la misma medida a todos los particulares, así como un aumento de la enseñanza a distancia hasta el 75%; es decir, todos los emplazamientos donde las máquinas automáticas concentran su actividad.
Esta reducción drástica del tráfico de personas y cierre de gran parte de edificios -de nuevo- vuelve a poner al vending entre la espada y la pared, y se traduce en una pérdida del consumo superior al 50% del volumen de negocios de las empresas, estima la Asociación Italiana de Distribución Automática. Y, sin embargo, el sector no ha sido incluido en el nuevo Decreto “DL Ristori”, que otorga ayudas a las empresas de diferentes industrias.
"El Decreto- comenta Massimo Trapletti, presidente de CONFIDA - ha concedido subvenciones no reembolsables de 2.400 millones a numerosos sectores económicos. Sin embargo, no incluye a la distribución automática, lo que pone en peligro a las 4.000 empresas de Italia que emplean a más de 30.000 personas con otras 12.000 actividades inducidas. El nuevo Decreto del Primer Ministro nos ha golpeado - concluye Trapletti - y pedimos al gobierno que nos incluya en las intervenciones a favor de los sectores en dificultad".
Y es que, las máquinas expendedoras tienen una presencia muy significativa en el país, superando las 800.000 instaladas, con presencia principal en, precisamente, las zonas que van a limitar sus horarios y personal: la industria (35%), oficinas privadas (15%), comercio (15%), escuelas y universidades (12%), oficinas públicas (6%) y transporte (3%).
A ello se suman las ordenanzas locales de alcaldes y presidentes de Regiones que golpean duramente con reducciones de tiempo y cierres, a veces injustificados, a las llamadas "máquinas expendedoras 24H”, es decir, aquellos negocios que venden alimentos y bebidas a través de máquinas automáticas y que, a pesar de haber invertido en altos estándares de seguridad, higiene y tecnología contactless y otros elementos que evitan el contagio, están sujetos a órdenes restrictivas que, en cualquier caso, no permiten la reactivación de un sector con gran proyección de futuro.