El autoservicio llega al mundo de la cerveza con el innovador sistema de Hoshizaki

HOSTELVENDING.COM 02/03/2021.- Bajo el nombre de BeerMatic Dual Tap DBF-AS65WE, el dispensador automático desarrollado por la compañía ofrece una “jarra” de cerveza como si del bar más tradicional se tratase; pero a través de un sistema unattended y con pago digitalizado.

Hemos llegado a ver las máquinas de latas de cerveza, pero una máquina que tira la cerveza como si del grifo de un bar se tratara… es otra historia; una historia que pudiera sonar a ciudades del futuro. Sin embargo, ¿no nos encontramos ya en pleno auge en cuanto a automatización y Smart cities? Al menos por lo que a fabricantes que operan en la distribución automática se refiere, nos sorprenden casi a diario con nuevas soluciones automatizadas, desatendidas, eficientes y seguras.

Y en cuanto a la nueva solución de uno de los fabricantes y distribuidores  de máquinas dispensadoras de hielo y sistemas de refrigeración más destacados, Hoshizaki, que en principio podría recordarnos a una superautomática de café, la tecnología va más allá, e incluso inclina el soporte a través de su sistema de inclinación –compatible con todos los formatos de vasos- en la en el ángulo correcto para obtener la “tirada” perfecta.

Volumen de consumo: ideal para grandes demandas

En este caso, se trata de una solución counter-top diseñada para aquellas localizaciones con un gran volumen o rotación; pudiendo servir 65 litros de cerveza fría de forma consecutiva. Además de su capacidad, otro de los rasgos más destacados del dispensador es su velocidad de servicio, ya que puede llenar hasta cuatro vasos (de 453 ml) en un minuto.

Perfecta para ubicaciones como locales de ocio, clubes deportivos y, sobre todo, de cara a una hostelería cada vez más débil y limitada, donde esta Beer Station podría ser la gran solución para recuperar la facturación permitiendo ahorrar en personal.

Por otro lado, el sistema de doble grifo y doble circuito permite conectar y servir dos tipos de cerveza de manera simultánea. Y, dado que el dispensador compacto se puede transportar e instalar fácilmente, también puede ser el equipo ideal para eventos al aire libre, ya que no requiere de unidad de enfriamiento adicional.

Ajustes automáticos: bebida artesanal

De igual forma, al contar con un control de porción, el tamaño de la bebida se puede configurar de tal manera que las porciones vertidas sean las mismas cada vez. Hablando de control, también se puede ajustar la espuma de la cerveza de manera independiente.

Así, la compañía ofrece una solución que sirve automáticamente la cerveza con solo pulsar un botón tras haber realizado el pago, que, en sintonía con la demanda actual, se basa en un sistema contactless desarrollado por la empresa especializada Sistemas de Venta y Control. Con este, el usuario puede realizar el pago a través del uso de tarjeta o de otros métodos de pago como ApplePay. 

Una vez pasada la tarjeta por el lector, la propia pantalla de la terminal indicará la selección para que el usuario pueda escoger el producto: rápido, sin contacto y con el resultado de la tasca más experimentada. Dicha pantalla muestra, en suma, el número de cervezas servidas.

Un modelo de negocio eficiente que reduce costes

Como mencionábamos anteriormente, la solución de Hoshizaki ofrece un servicio de calidad y que reduce costes de distinta índole, ya que cada detalle y parámetro está medido al detalle para reducir al máximo posibles derrames o las consecuencias de un personal inexperto; todo ello, gracias a su sistema BEERMATIC.

Además de la propia eficiencia de la máquina, el operador o dueño del tendrá disponible un negocio unattended. Este hecho supone un ahorro tremendo, al tiempo que supondrá no tener que involucrarse con la venta de estos productos; haciendo posible no tener que contar con un empleado para el puesto. Serán los propios consumidores los encargados de realizar la transacción.

Y para el personal ya contratado, al no requerir atención adicional hasta que la cerveza no está servida, le permitirá dedicarse a otras tareas procesar pagos, preparar pedidos o limpiar. Estos segundos ahorrados parecen marginales, pero al atender grandes cantidades de personas estos segundos se convierten en horas, horas que los empleados pueden invertir en proporcionar un servicio al cliente más eficiente.

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