Especial Inteligencia Artificial: La parte más emocional de la venta automática (Parte 2)

¿Cómo conseguir tocar el corazón del usuario final?
HOSTELVENDING.COM 22/02/2022.- Después de tantos proyectos y pruebas de ensayo error, hoy podemos afirmar que, en efecto, la tecnología puede ser cálida y amigable. Encontramos, paradójicamente, la parte más emocional de la venta automática gracias a la aplicación de la Inteligencia Artificial, ¿pero cómo?
Si bien todo lo relacionado con Inteligencia Artificial está de moda, habría que diferenciar, para el sector del vending básicamente entre dos tipos de IA:
- Restringida: Realiza tareas programadas definidas previamente. Por ejemplo: El usuario se identifica en la máquina de vending y se le ofrecen los productos que más consume a un precio reducido si realiza un combo o venta cruzada con otros.
- General: Es capaz de aprender y tomar decisiones. Ejemplo: El usuario abre una nevera y el sistema le reconoce, identifica los productos que retira y se los cobra de su cuenta.
“En cuanto a ofrecer un servicio más cálido, tendríamos que diferenciar entre máquinas en un entorno cerrado, donde hay que tener cuidado con el exceso de comunicación y ofertas al usuario para no ser demasiado invasivo, y máquinas en entorno público, donde podrían tener entrada los boot de IA de comunicación bidireccional usuario – máquina”, Prodelfi.
La IA acerca la máquina al usuario y la humaniza
Tras analizar las diferentes opciones, podemos afirmar que la forma más cálida de llegar al consumidor es ofreciendo un servicio que perciba como exclusivo para él, es decir, personalizado. Así lo subrayan desde compañías fabricantes de máquinas automáticas como Bianchi Vending, cuyas soluciones no solo permiten personalizar su bebida, sino detectar la proximidad de un usuario a la máquina:
“Con la integración de aplicaciones de terceros, detectar la proximidad de un usuario a la máquina para ofrecer su producto favorito, o avisarle cuando la hora habitual de su pausa se aproxima para sugerirle tomar una bebida o un snack”, explica Bianchi.
El sistema ofrece múltiples posibilidades de comunicación directa con el usuario final, lo que lleva a una compra más amigable y con sensación de total seguridad.
Experiencia amigable: motivar una relación máquina-humano duradera
En esencia, la interacción con la máquina da como resultado la elección de la bebida, o del producto alimenticio dependiendo de la máquina a la que nos estemos refiriendo.
“El usuario puede hacer la selección de su producto desde la aplicación sin tocar la máquina, solicitar un ticket de compra, enviar sus comentarios e incluso, en caso de haber surgido un problema en el momento de la compra, puede ser verificado en ese mismo momento y ofrecer una solución instantánea y en remoto”, Automated Vending.
El usuario recibe información directa, promociones, felicitaciones, obsequios… y en su aplicación quedan registradas todas las interacciones que ha tenido con la máquina, por lo cual, efectivamente, se crea un tipo de vínculo entre máquina y usuario.
Por ello, una interfaz intuitiva e interactiva le permitirá elegir su bebida, obtener la lista de ingredientes y posiblemente excluir ciertas bebidas que contengan alérgenos, por ejemplo, y finalmente personalizar su bebida.
Es el consumidor quien decide lo que va a consumir según sus deseos; ya no es una oferta de producto impuesta.
Si la máquina es capaz de identificar a un usuario concreto (esto requiere una previa autorización a guardar datos facilitados por el mismo usuario), mediante apps de terceros instalados, en la máquina se podrían llevar a cabo acciones especiales, como nos trasladan desde Bianchi. Por ejemplo, felicitar al usuario en el día de su cumpleaños, invitarle a un café gratuito, sugerir probar un producto más goloso en un día especial o emitir un video de felicitación. De esta forma, la máquina se posiciona como un equipo moderno e interactivo.