Los atenienses toman la iniciativa ante los precios del café

Aquellos que aman una buena taza de café en la capital griega -que son muchos; se calcula que alrededor de 5.800 millones de tazas se consumen al año en todo la nación- tienen mucho que reclamar y han tomado cartas en el asunto. Así pues, se hizo una llamada a los ciudadanos para que se abstuvieran de tomar café en las cafeterías de Atenas, sino solamente en sus casas. La convocatoria se hizo a través de Internet para el pasado sábado 10 de abril y corrió como la pólvora gracias en gran parte a los blogs personales.Esta iniciativa popular, apoyada no obstante por la Unión de Consumidores NEO INKA, reclama los altos precios del café en Atenas, que oscila entre los 2,50 y 6 euros por taza. Según ha declarado un representante de NEO INKA a la agencia EFE, "en Atenas se bebe uno de los cafés más caros de Europa; es un atropello al cliente y una ganancia extraordinaria a costa de los consumidores".
Los empresarios se escudan en los altos precios que tienen que pagar por el alquiler de sus locales, especialmente en las zonas céntricas de la urbe. Igualmente, justifican los altos precios como consecuencia de la alta carga fiscal que acarrea el permiso para ocupar la vía pública con sus terrazas; además del sueldo de camareros y la alta calidad del servicio.
En espera de resultados y cifras fiables, habrá que estar atentos al grado de repercusión y a las posibles consecuencias -positivas y/o negativas- que pueda haber tenido esta iniciativa en el comercio griego del café.