Un café gratis por suscripción, la nueva estrategia de Burger King

HOSTELVENDING.COM 10/07/2019.- ¿A quién no le apetece un café recién hecho? Y si encima es gratuito, ¿quién puede resistirse? Bajo esta premisa marcha la nueva estrategia de marketing de la más que conocida empresa de comida rápida: Burger King.
Si bien es cierto que el mercado del café no está en su mejor momento, como ya lo apuntara el informe elaborado por Starbucks, tomar un café ha pasado a ser un imprescindible en la vida de muchos estadounidenses.
Una realidad que conocen desde Burger King, por lo que no han querido dejar pasar la oportunidad de utilizar este hábito cafetero como herramienta de fidelización. De esta forma, prácticamente en todos los restaurantes de la empresa de hamburguesas pertenecientes a EE.UU, los consumidores ya pueden suscribirse al restaurante por cinco dólares. Por ahora, los únicos estados que no se han integrado al plan han sido Alaska y Hawai.
¿Qué ventajas trae esta suscripción?
Una vez abonas esos cinco dólares, automáticamente tienes disponible la posibilidad de consumir un café de manera gratuita en los establecimientos de la compañía. Sin embargo, no se trata de una oferta de uso ilimitado, sino que el usuario podrá utilizar esta promoción una vez al día en el restaurante que prefiera.
Como era de esperar, tampoco se puede elegir cualquier café. Así, los frappés y otras bebidas más especiales no entran en la oferta. Así que, aquel que vaya con la intención de consumir una bebida más novedosa de Burger King o de mayor rango, tendrá que limitarse a recibir un café normal, o pagar por la bebida que tuviera en mente.
No obstante, obviando las limitaciones -cosa que ocurre en todas las promociones-, esta idea genera un gran valor añadido al consumidor habitual de café. Por una parte, podrá disfrutar de un café producido a base de grano café arábica, y por otro, tiene disponible un café gratuito, prácticamente, al día.
Un sistema del que también pueden beneficiarse los propios trabajadores; quienes podrán usar las máquinas de café integradas en su zona de trabajo y ahorrarse una cierta cantidad de dinero. Estamos de un hablando de un ahorro notorio: si tenemos en cuenta que las máquinas de café automáticas suelen vender el café en torno a unos 50 centavos, el usuario estaría economizando diez dólares mensuales.