Solo comida 100% saludable en las expendedoras… y agua gratis: objetivo en Madrid

¿Cómo regula cada CCAA la oferta de productos en expendedoras?

HOSTELVENDING.com 21/05/2018.- Desde hace unos meses, no hay semana que no encontremos alguna propuestas legislativa que incluya un cambio sustancial en la industria del vending.

Como canal de distribución alimentaria con gran protagonismo en los espacios públicos, el vending ha pasado a formar parte de las nuevas políticas alimentarias y medioambientales, una relevancia que aunque crea cierta reticencia en ciertos ámbitos del sector demuestra el peso o la importancia que sigue adquiriendo.

Venimos señalándolo en Hostelvending desde hace ya algunos años y ya está más que confirmado, la oferta de las expendedoras ha estado señalada desde el inicio de la actividad y las empresas tiene que tomar conciencia de la necesidad de transformarla antes de que sea demasiado tarde.

Y un ejemplo más es la proposición de ley que presentó el pasado 10 de mayo el grupo parlamentario de Podemos en la Asamblea de Madrid, una normativa cuyo propósito es garantizar la disponibilidad de alimentos saludables en todo lo relacionado con la restauración colectiva y los servicios que dependen de la administración pública.

Es una declaración de intenciones y tiene que contar con el apoyo de otros partidos para salir adelante, por lo que no es inminente que el texto llegue al marco normativo de la comunidad en el medio plazo. Sin embargo, no es la única región en la que se ha abierto el debate, es más, con la nueva Ley de Contratos del Sector Público, muchos de los puntos que se recogen en la proposición que nos han remitido desde el gabinete de prensa de la formación morada están presentes de una u otra manera.

Engloba toda la compra pública alimentaria, que debe ser saludable y sostenible, a través e la regulación de todos los contratos de carácter administrativo efectuados por los organismos y empresas que tienen potestad para impulsarlos y que se centra en la adquisición de bebidas o productos alimentarios.

El objetivo es "contribuir a garantizar el derecho a una alimentación adecuada, fomentar así la salud y la calidad de vida de las personas que habitan en esta Comunidad y contribuir a la transformación del sistema alimentario de acuerdo con los objetivos de cambio climático", según establece el texto.

“A pesar de los enormes beneficios de la dieta mediterránea y de la calidad de nuestros alimentos, el sistema alimentario evoluciona en sentido contrario. Los datos disponibles por instituciones científicas independientes muestran como un 60% de la población española sobre sobrepeso y un 20% tiene obesidad”, recoge la introducción.

Además se afirma que “actualmente, el 70% de la dieta española se basa en alimentos procesados, a la mayoría de los cuales se le añaden ingredientes para mejorar sus cualidades organolépticas o su conservación, su transporte y, por supuesto, el precio. A la alimentación insana se le puede atribuir en España entre un 40% y 55% de las dolencias cardiovasculares, un 45% de los casos de diabetes y entre un 30% y un 40% de algunos tipos de cáncer, como el de estómago y de colón”.

Estas tres enfermedades suponen el 20% del gasto sanitario en España. “Nuestra dieta ha cambiado y hoy en día consumimos un exceso de azúcares, grasas insolubles y dosis. Estos ingredientes críticos viajan a través e la alimentación procesada y precocidad que cada vez ocupa una parte más importante de la dieta familiar media. En España se ha incrementado muy considerablemente el consumo de dichos ingredientes, a pesar de que la inmensa mayoría de la población sabe que hay que reducirlos”, resaltan en la exposición de motivos.

El artículo 20 se reserva exclusivamente para todo lo relacionado con las máquinas expendedoras y otras formas de suministro de alimentos. La principal obligación será la de promocionar los alimentos saludables en los edificios públicos, sobre todo, en los centros docentes y los relacionados con la salud.

En los de carácter más general, se trata de incluir oferta propia de una dieta saludable, y centrándose con más detalle en los colegios y los centros sanitarios y de promoción deportiva, se amplía a vender comida 100% saludable, negando la posibilidad tanto a alimentos ultraprocesados como a comida y bebida con alto contenido en azúcar y aceites refinados.

Agua gratis y de fácil acceso

Como ha establecido el Partidos Socialista en la Ley de Promoción de Vida Saludable de Andalucía, un aspecto muy importante es la obligatoriedad de dar agua gratis. “Las máquinas expendedoras de alimentos envasados y bebidas, instalarán y mantendrán operativa una fuente de agua potable y de acceso gratuito, ya sea integrada en la máquina distribuidora o en una distancia de hasta dos metros de estas. Las puentes deben tener la leyenda “El agua es la bebida más saludable y sostenible”.

Empieza a ser una práctica común que, evidentemente y tal y como están evolucionando otras normativas también a nivel europeo, se va a terminar extendiendo a todo el territorio nacional, con lo que el vending y las fuentes de agua van a tener que asumir una nueva relación para lograr un beneficio mutuo.

Siguiendo con el análisis de la proposición, las bebidas refrescantes siguen en el punto de mira y tendrá que reducirse su presencia en las máquinas sin que puedan sobrepasar el 30% de la oferta, estando además debidamente señalizadas. Este punto se complementa con la necesidad de contar con “un 20% de opciones de zumo de fruta sin azúcar añadido y siempre deberán ofertar agua”.

Una vez más se impulsa el consumo de fruta , frutos secos y lácteos que se deberían extender, de aprobarse la propuesta de ley, hasta el 50% de la oferta, debiéndose colocar en las zonas más visibles de la máquina. Como sucede con los refrescos, los alimentos con alto contenido en azúcar (se entienden snacks y bollería), tampoco podrán constituir más del 30% del total.

Por último, se recoge un apartado dedicado al comercio justo. Así, se apuesta por reservar el 50% de la oferta del café y el té a este tipo de productos, debidamente acreditados. Asimismo, se hace referencia a la necesidad de proveer bebidas de origen vegetal para completar.

"No se puede consentir que en centros como los hospitales se sigan ofreciendo contratos donde el 55 % del peso es un criterio económico", ha declarado a los medios el diputado de Podemos Miguel Ardanuy.

El parlamentario ha explicado que, entre otros aspectos, pretenden que haya un "límite claro y establecido de comidas preparadas en los centros públicos" y que las máquinas expendedoras no contengan "productos insanos".

Tanto Podemos como el PSOE están intentando liderar esta corriente de alimentación saludable en las diferentes comunidades autónomas, así como en los gobiernos locales con iniciativas municipales que intentan fomentar una mejor valoración de los contratos con empresas capaces de diseñar una oferta alimentaria alejada de lo que tradicionalmente ha dado el vending.

Ahora esta nueva proposición de Ley llega a la Asamblea de Madrid, donde comenzará su ciclo parlamentario para ver si finalmente tras el debate logra empezar a formar parte del marco legislativo de la región que, después de todo lo sucedido, sigue gobernando el Partido Popular.

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