Por un consumo responsable y no adictivo de las bebidas energéticas y estimulantes

HOSTELVENDING.com | 22/12/11.- Pocos días después de conocer la nueva normativa que obliga a las bebidas energéticas a especificar mejor su contenido en cafeína, y alertar sobre sus riesgos, salen a la luz algunos de los motivos por los que esta normativa se hacía más necesaria que nunca. Y es que las visitas a los hospitales estadounidenses por un exceso en el consumo de cafeína, han pasado en tres años de 1.128 a 16.053.
Según datos del Servicio de Administración de Abuso de Sustancias, se ha multiplicado por diez el número de consultas hospitalarias por el uso de bebidas energéticas. Un 67% de las consultas fueron producto de las reacciones adversas a estas bebidas estimulantes al ser consumidas solas, mientras que el resto fue en combinación con el alcohol u otras sustancias.
Estos datos, desgraciadamente, confirman que las bebidas energéticas pueden causar, por sí mismas, daños a la salud lo suficientemente serios como para ir al hospital. Este servicio de salud cita a las marcas Red Bull, Monster, Rockstar, Full Throttle y Amp, las cuales reconocen que casi la mitad de sus consumidores son jóvenes y adolescentes.
Además de obligar a cambiar ciertos criterios en el etiquetado, se está pensando regular más la publicidad de estos productos, que siempre apelan a un aumento de la energía y las capacidades físicas y mentales en los consumidores, siendo así de lo más efectivo, ya que las principales firmas han subido en ventas en un 240% en el último lustro.
La mayoría de los investigadores defiende que los adultos mantengan una ingesta moderada de cafeína: de 100 a 200 miligramos al día. Los pediatras, en cambio, consideran que los niños y adolescentes deben abstenerse de tomar bebidas que contengan estimulantes.
El exceso de cafeína que se ingiere con las bebidas energéticas puede causar arritmias, hipertensión, deshidratación, además de insomnio y nerviosismo. Otros riesgos adicionales dependerán del estado global de salud de cada individuo, pudiendo caer incluso en el síndrome de abstinencia.
En otro orden de cosas, la Federación Española de Bebidas Espirituosas (FEBE) ha hecho público un informe por el que prevé cerrar 2011 con un descenso de las ventas cercano al doble dígito como consecuencia de la crisis, que provocará este año el cierre del 5% de las empresas del sector (integrado por unos 150 fabricantes) y la pérdida de alrededor de 10.000 puestos de trabajo directos e indirectos.
El sector de las bebidas espirituosas comercializó en 2010 alrededor de 254 millones de litros, con un valor de mercado de unos 7.400 millones de euros. Un dato relevante, es que la la marca blanca ha duplicado su cuota de mercado en el segmento de bebidas espirituosas, desde el 3% hasta en torno al 8%, aunque este avance se trata de una penetración baja en relación con la media del sector de la alimentación y bebidas (40%) y porque las marcas 'premium' han crecido al mismo ritmo.